Al eslabón de cruel
trató el pedernal un día,
porque a menudo le hería
para sacar chispas de él.
Riñendo éste con aquél,
al separarse los dos,
«Quedaos -dijo- con Dios.
¿Valéis vos algo sin mí?» <
/>
Y el otro responde: «Sí,
lo que sin mí valéis vos».
Este ejemplo material
todo escritor considere,
que el largo estudio no uniere
al talento natural.
Ni da lumbre el pedernal
sin auxilio de eslabón,
ni hay buena disposición
que luzca faltando el arte.
Si obra cada cual aparte,
ambos inútiles son.
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